Si hay un término en boga en los laboratorios de Neurociencia es la Inteligencia de Cambio. ¿Cómo? ¿Hay que ser inteligentes para cambiar? Y sí, esta nueva propuesta lo que mide es qué tan inteligentes somos o estamos siendo para cambiar.

Hoy más que nunca esto es importante, si bien ya se hablaba de tiempos volátiles, emergentes con altos márgenes de vulnerabilidad, en donde el cambio es la constante o la única salida. Aquí veremos de forma resumida ¿Cómo le hace un cerebro para cambiar?

 

Aprendamos a cambiar

Y esto implica muchas otras habilidades que contribuyen, para que logremos adaptarnos a lo nuevo o seamos más inteligentes para cambiar.

Te menciono tres habilidades correlacionadas; como: La creatividad o el pensar cosas que antes no pensábamos. El growth mindset o mentalidad de crecimiento. Y, la flexibilidad cognitiva o ser flexibles para poder salir de nuestros pensamientos habituales. 

Pero vamos de lleno. ¿Cómo es que se mide la inteligencia de cambio?. Por tres simples, introspectivas y complejas preguntas que te planteo y luego te menciono un  ejemplo.

 

1) ¿Eres consciente que eres tú, él o la que tiene que cambiar?

Por más que te quejes de la situación, de la economía, de los cierres, de la virtualidad, de tu jefe, de las videoconferenecias, de tus colaboradores, etc. Todo eso seguirá igual o peor. ¿Por qué? porque eres tú, él o la que debe de tener inteligencia de cambio, es decir, el o la que debe de cambiar.

 

2)  ¿Quieres cambiar?, ¿sí o no?

Aunque pareciera una palabra sencilla, cuando “no” queremos, casi nada se puede hacer. Y si nos obligan a cambiar, traerá consigo más dolor o el cambio será más sufrido. Esta es otra causa de que muchas empresas quebrarán o muchos colaboradores decidieran renunciar, por no querer cambiar, ya sea las formas, los procesos, la diversificación, la virtualidad o el delivery del negocio.

Obvio que hubo otros factores de quiebre de empresas. Sin embargo. ¿Qué harías si te viene una ola encima y resulta que no sabes nadar y crees que puedes controlar la magnitud de la ola?. Va por ahí, esta segunda pregunta introspectiva sobre la inteligencia de cambio.

 

3) ¿Cómo?

Mucho tiene que ver, en qué crees que te puede ayudar a cambiar, muchos ocupan la reingeniería, consultores de negocio. Nosotros desde www.m1nd.mx ocupamos la neuroplasticidad organizacional enmarcada en: orden sistémico, la neuroplasticidad autodirigida y la mentalidad de crecimiento (growth mindset).

 

Nuevo paradigma de la inteligencia

Con esto, ya se quedan muy por debajo, el IQ, junto con la teoría de Howard Gardner de las Inteligencias Múltiples. Empecemos a hablar y a normalizar el CQ el Coeficiente de la Inteligencia de Cambio, que tiene que ver con las tres preguntas introspectivas que ya leíste.

 

Inteligencia de cambio

Mucho del cambio tiene que ver con cómo pensamos lo que pensamos y con el significado que le damos a lo que estamos transitando. Es muy curioso, cómo esto aplica a las personas y también a las empresas.

Es decir, que: no es lo que suceda lo que pone en crisis a las empresas, sino en cómo lo están significando o qué significado le dan. Y me refiero a quienes llevan a las organizaciones a flote a través de sus decisiones. Por más que queramos ver a las empresas como entes que caminan solos, nunca es así, siempre las decisiones y los rumbos, lo marcan personas.

 

En conclusión 

Es desde ahí, que podemos empezar a mencionar al Coeficiente Intelectual de Cambio, para lograr hacerle frente al futuro incierto, haciéndonos conscientes y responsables, en que el cambio empieza con uno y luego, éste podrá impregnar las demás esferas.

Sigamos la conversación gabriel.delavega@m1nd.mx

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